Palabras llenas de vida, alegría, amor… ¡Momentos para sonreír! Y es por ello que queremos compartirla con todas aquellas parejas que puedan estar en su misma situación:

• Mujeres con obstrucción en las trompas de falopio
• Endometriosis
• Reserva ovárica limitada
• Esterilidad de origen desconocida
• Alteraciones ovulatorias
• Parejas con factor masculino severo
• Parejas que no han conseguido el embarazo mediante otras técnicas de reproducción asistida

Cuando piensas en ser madre te haces preguntas como ¿será niño?, ¿será niña?, ¿se parecerá a mí?, ¿a su padre?… Piensas en muchas cosas, pero nunca te imaginas cómo ese camino de amor y felicidad para algunas personas es una lucha en todos y con todos los sentidos para conseguir algo tan “sencillo” como un bebé al que entregarle su amor. 

Estas mujeres apartan su dolor físico, psíquico y emocional y entregan su corazón, muchas veces hecho pedazos, a los médicos que buscan y buscan para encontrar una solución.

En muchos casos se logra un desenlace exitoso pronto, pero en otros como el mío lleva más tiempo, con el consecuente desgaste que acarrea, pero hay cosas que cuestan más conseguirlas, otras menos y otras simplemente nunca llegan. Lo importante es proyectar en positivo y buscar soluciones. Cuando sientas que no puedes más o que te fallan las fuerzas para, descansa, tómate tu tiempo y si lo necesitas ve al psicólogo, que es gran aliado no sólo en este proceso sino en el día a día.

Llegar al germen del problema muchas veces no es tarea fácil, ya que influyen muchísimos factores en la reproducción humana, desde el propio sistema reproductor, al endocrino, linfático, etc, y hay que pasar por numerosas pruebas y tratamientos para poder encontrar qué nos impide ser madres, tratamientos que en muchos casos no son agradables y producen desajustes emocionales, no asegurando que vaya a tener un final feliz. Pero siempre hay que tener en cuenta que un fracaso nos abre más el camino, nos dice por dónde no hay que tirar y eso, aunque en el momento de una beta negativa se te hunde el mundo, es algo muy valioso.

No quiero dejar de lado el apoyo social y familiar, es muy importante un acompañamiento desde el amor y la comprensión. Hay personas que puede que no entiendan lo que estás pasando, y seguro que no lo entienden porque hay que pasar por esto para saberlo, pero que carecen de empatía o incluso personas que te presionan… intenta apartarlas de tu vida porque no valen la pena y no te merecen.  En cambio, encontrarás personas maravillosas, que harán todo lo posible para sacarte una sonrisa, y mostrarle su apoyo incondicional, son “personas de luz” que te harán bien siempre.

En el tema laboral, muchas mujeres esconden que están en tratamiento de reproducción asistida por miedo a perder su trabajo. Yo he dicho que tengo un jefe maravilloso, que no sólo lo sabía, sino que es una persona de luz en mi día a día.

Actualmente se habla con un poco más naturalidad de la infertilidad, pero siguen existiendo muchos tabúes, desinformación e ignorancia con un problema que señala directamente a las mujeres, y les crea en muchos casos sensación de culpa, fracaso, frustración e impotencia.

La reproducción humana requiere inherentemente un componente masculino y otro femenino, pero las mujeres son las que “riegan”, cuidan durante nueve meses al embrión y las que le dan la vida. Esa aportación es infinitamente mayor que la del hombre y por tanto más cargada de posibles problemas, es simplemente estadística.

Tengo que agradecer a mis padres (entre las miles de millones de cosas), su amor y apoyo incondicional y que me enseñaran que siempre hay que mirar hacia delante, lema familiar que siempre me ha ayudado tanto.

A mi marido su amor, somos un gran equipo, hemos ido a buscar a nuestro peque hasta el final del arco iris, y las dificultades lo único que han conseguido es hacernos grandes.

Para la doctora Elena Puente me faltan palabras de agradecimiento, donde otros nos explicaron que no había nada más qué hacer, ella nos tendió la mano para seguir ayudándonos, y sin ella nuestro hijo no estaría aquí.

A la doctora Vega, gracias por todos tus mensajes de apoyo y tu cariño, que van más allá de lo profesional.

A las sonrisas que hay detrás del teléfono: Juani y Sofía. 

Gracias Loli por atenderme a cualquier hora y resolver mis dudas y gracias por darme la mano en las transferencias.

Al equipo de embriólogos, Cristina y Luis, que aunque menos visibles, están ahí al pie del cañón. Y gracias a la doctora Villegas por su profesionalidad en el seguimiento de mi embarazo.

“Si las hadas existen, trabajan en Fertia”.

En Clínica Fertia somos especialistas en Fertilidad de Alta Complejidad. Si estás en una situación similar y necesitas más información sobre la fecundación in vitro puedes contactar con nosotros y pedir tu 1ª cita gratuita.