Ecografía de la semana 20
Es probablemente la ecografía más importante de toda la gestación, también llamada ecografía morfológica. Esta ecografía se realiza en un momento en que casi está completa la formación de los órganos fetales, por lo que hacemos un estudio detallado anatómico descartando gran parte de las malformaciones (prácticamente el 70% de las diagnosticables por ecografía) y además se hace nuevamente un despistaje de marcadores ecográficos de cromosomopatías.
Debes saber que no se pueden diagnosticar malformaciones que no se expresan físicamente, como sordera, ceguera, retraso mental, enfermedades metabólicas o hereditarias y otras.
Hay malformaciones que en esta semana de embarazo aún no se objetivan y siempre las debemos valorar en el tercer trimestre del embarazo, como algunas malformaciones renales o de los huesos.
Durante la realización de la ecografía morfológica también puede medirse el Doppler de las arterias uterinas y el cuello del útero. La medición del flujo que pasa a través de las arterias uterinas mediante ecografía Doppler permite entender cómo está funcionando la placenta y se usa para valorar el riesgo de algunas complicaciones del embarazo como la preclamsia (hipertensión del embarazo) o retraso de crecimiento intrauterino (problemas de crecimiento del bebé).
La medición del cérvix o cuello uterino sirve para estimar el riesgo de parto prematuro. Tanto el Doppler de uterinas como el cérvix uterino pueden ya medirse en la ecografía de primer o de segundo trimestre para valorar el riesgo de posibles complicaciones del embarazo.